Las primeras apariciones de los broches remontan a mediados del siglo XIX, sus primeras aplicaciones se emplearon en la indumentaria teatral para agilizar los procesos de cambios de vestuario, tiempo después se implementaron en uniformes militares y finalmente en 1885 se comercializaban para el vestuario civil.

En la década de los 30 ingresa en las tendencias de moda y se ve reflejado en camisas, pantalones y casacas masculinas tomándose como una parte decorativa y porte de estilo. Es así como Jean Paul Gaultier en 1988 diseña una chaqueta de mezclilla sin hombros donde destaca principalmente la botonadura.

A raíz del gran apogeo que tuvo el implementar los broches en las prendas de ropa como un elemento facilitador y visualmente llamativo se comienza a implementar en una mayor cantidad de prendas. En la actualidad es considerado como un elemento que ayuda a complementar y resaltar la ropa a través de sus diferentes acabados, brindando un toque de estilo. Broches Ideal participa en esta industria siendo fabricante de broches de diferentes tamaños, colores y acabados y de esta manera lograr un mejor estilo en las prendas.